miércoles, 18 de mayo de 2011

Anoche

Anoche me di cuenta que los perros pueden ladrar toda la noche sin parar y de forma constante.
También que Bukowski siempre te puede patear el orto más fuerte.
Anoche me di cuenta que la soledad puede ser una buena compañera, la pasamos bien juntos.
Anoche me puse a pensar que no extraño nada a Buenos Aires.
Me di cuenta que es fundamental tener encanutado algo dulce, un Nugatón, ponele.
Anoche me di cuenta que los minutos pueden pasar muy lentos o rápidos cuando quieren.
Me di cuenta que me hubiese gustado aprender a tocar la guitarra. Nunca lo había pensado.


Anoche me di cuenta que el insomnio puede ser muy revelador.




3 comentarios:

  1. Buen momento para arrancar con la viola eh!

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  2. Si, salvando el pequeño detalle que soy un zurdito pusilanime (?) y el mundo no está hecho para Ned Flanders y para mi.

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  3. me gusta mucho esto.
    sin dudas el insomnio es revelador, igual que el momento en el que te comés un chocolate o en el que estás practicando algún acorde jodido con la viola y parás a descanzar los callos de los dedos, mirando un punto fijo y vacío.

    yo tampoco extraño bs as, aunque debe ser porque estoy acá. extraño las montañas, pero cuando estoy rodeada de ellas me agarra una melancolía de horizonte insoportable. inconformismo citadino.

    en fin, un abrazo desde la urbe!



    (ah, sí, conozco la revi de césar, “¿todo piola?“, está very buena! )

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