Bueno, convengamos que probar el timbre es una de las opciones a evaluar, si alguien se para frente a la puerta de bajada de un colectivo previo a una parada. Está bien, no es lo más probable, pero no deja de ser una de las probabilidades. Pobre señora (?)
Yo también he visto gente que se para al lado de la puerta y con su mano tapa el timbre, si bien no llega a accionarlo. Me parece que es el caso más difícil de discernir si se está por bajar o no.
Tal vez a quien haga eso le guste tener por un rato la sensación de que los demás pasajeros le tienen que pedir permiso para bajarse.
Resultando menos confusos pero igualmente molestos, están los que se sientan en los escalones junto a la puerta (en la puerta del medio). Claramente no lo hacen por comodidad, sino quizá por rebeldía (la extraña rebeldía de sentarse donde no se debe), porque no es nada cómodo que cada vez que alguien baja te tengas que correr y encima te patee un poco.
En esos casos siempre tengo la tentación de preguntar: "¿Bajás?", no sin ironía.
Bueno, convengamos que probar el timbre es una de las opciones a evaluar, si alguien se para frente a la puerta de bajada de un colectivo previo a una parada. Está bien, no es lo más probable, pero no deja de ser una de las probabilidades. Pobre señora (?)
ResponderEliminarYo también he visto gente que se para al lado de la puerta y con su mano tapa el timbre, si bien no llega a accionarlo. Me parece que es el caso más difícil de discernir si se está por bajar o no.
ResponderEliminarTal vez a quien haga eso le guste tener por un rato la sensación de que los demás pasajeros le tienen que pedir permiso para bajarse.
Resultando menos confusos pero igualmente molestos, están los que se sientan en los escalones junto a la puerta (en la puerta del medio). Claramente no lo hacen por comodidad, sino quizá por rebeldía (la extraña rebeldía de sentarse donde no se debe), porque no es nada cómodo que cada vez que alguien baja te tengas que correr y encima te patee un poco.
ResponderEliminarEn esos casos siempre tengo la tentación de preguntar: "¿Bajás?", no sin ironía.
Amigos, sus comentarios me hicieron reflexionar.
ResponderEliminarSerá que me estoy volviendo intolerante?